Zuleika Merced

Poesía para mí,  es el espejo de mi alma enamorada.

Poemas de Zuleika Marced

Arropame Con Mi Bandera

Cuando mi cuerpo muera
arrópame con mi bandera
en el campo santo ,acuesta mi cuerpo inerte mirando al sol
No me brindes por piedad ausente, una corona de flores. Solo mi bandera, que con sus colores brindan suficiente amor
Deja que mi cuerpo descanse en algún lejano monte.
Deja que los verdes, verdes, se acuesten mirándolos yo,
deja que la lluvia sutilmente bese siempre mi frente y el
coquí me acompañe a mi tumba con su mejor canción.
Deja que aunque esté muerta y aparente estar en mi alma ausente, deja que la montaña  vierta en mi su llanto y dolor.
Deja que mis luceros estén también  en mi presentes
Este cielo mío que amo, de mi suelo borincano de esplendor
No quiero que de tus ojos las lágrimas se queden, prefiero la de mis monte,ríos, las lágrimas de mis lagos
Cuando muera, no llores arrópame con mi bandera
Será en mi un largo viaje, de todos será mi mejor regalo.
Perfuma mi cuerpo inerte con gardenias silvestres y con flores de moriviví, adorna si quieres mis manos
para aún así cuando esté muerta ,sienta que las estoy
pisando para abrirse nuevamente en otro cielo, quizas esta vez más lejano y
derramarse en mi luz de luna y de madrugada levantar el gallo
Cuando me muera no llores, !Arrópame con mi bandera!
Mi cabello péinalo con la caricias suaves del árbol y mis vestidos sea las noches de ópalo de mi tierra
Mi almohada sea la playa para dormirme en silencio en sus brazos

!Arrópame con mi bandera! Será el sueño absoluto y sacro-santo
Que me acompañen las palmera, los flamboyanes, los jíbaros del campo.
!Arrópame con mi bandera!
En las tardes hagan fiesta los cucubanos;apacible recuerdo cuando la arena a mi cuerpo con el mar besan,
cuando la ola insiste siempre de nuevo y en las noches nos alejamos como lloran mis versos en las noches ardientes de mis luceros!Arrópame con mi bandera!
Será el abrazo de todos los boricuas hermanos
Me quedaré en la poesía loca, de lluvia se mis versos amados
!Arrópame con mi bandera!, cubre mi cuerpo de malojillo verde, verde, mirando siempre a mi cielo azul de mi tierra en el ocaso, caundo el mar ajeno en el horizonte se pierde y se duerme
Donde en silencio las nubes cantan con los angeles su hermoso canto
Corona mi frente con amapolas, rosas , café y una danza de laureles

!Que se quede mi cuerpo al fin para siempre, en mi bendito suelo borincano!

Es Dulzura es Infierno

He tratao, arráncarte del alma
te juro no miento.
Que se calcinen toítos mis huesos

Que deje de brillar la luna
en los valles del recuerdo.
Has sido agua fresca
cual prohibida fruta
pa mis labios de tí, sedientos.

Si quererte ha sío dulce,
como ha sío amargura
querer olvidarte en dudas
ha sío negro infierno.

Locura, maldita en locura
arrebata el pensamiento
donde el olvido determina
nunca, olvidarte solo para empezar
en delirio de nuevo.

Hacia inalcansables
lejanas alturas
donde quererte ha sío tortura
estando el destino ajeno
aún sabiendo.

Es rabía besando dulzuras
apagando al universo
es agonía que destruye
ausencias de tu cuerpo.

He tratao de arrancar las raíces
vivas del sentimiento
besos que apretujan cuál enredadera
los sentires en disputa
corroen sin piedad
los secretos ,de tus secretos.

Si quererte ha sío negrura
olvidarte ha sío tormento
luz que la mía no alumbra
suspiros nacientes, muertos
si he sío solo aventura
tu has sío, maldición
mi mejor momento.

Recuerdo que se arrodilla
sabiendo cuánto te quiero
mar en alzada
haciéndome prisionera
del viento.

Amor esparcido en la bruma
es tu alient, en mi aliento
te he querío en albores
rayando resplandecientes
los distantes luceros.

Te he querío,
por que me da la gana
de quererte tanto
y estoy sufriendo
y ahora en desquite del alma sabiéndote ajeno
no le ha dao la gana
de olvidarte
en las inmensidades
del tiempo.
Donde talle ,a talle,
eramos dos en uno, perfecto.
olvidarte te juro, ha sío
mi tortura
recordarte ha sío,  el peor
de los infiernos
que me quemen las llanuras
si en tus brazos de nuevo
una noche de luna
olvidándote
agonizante en tí, vuelvo y me pierdo.

Por: Zuleika Merced
10/15/2000

Por Zuleika Merced
Derechos reservados 1999
Puerto Rico Yira

Zuleika Merced nació en San Juan, Puerto Rico en 1950. Actualmente radica en Canóvanas en lo que ella llama su montaña y su mundo, rodeada de las bellezas de la naturaleza, ya que ve el mar, el Yunque, el verde de sus montañas, su cielo y las estrellas. Curso grados secundarios en la Escuela Gabriela Mistral y luego un grado asociado en secretarial. El amor que siente por la poesía es inmenso y así escribe desde los 13 años; pero es ahora que por primera vez pone a la luz pública sus poemas. Sus inspiraciones son sólo versos que se derraman en su alma escribiéndole al amor, la ausencia, lo prohibido, los sueños, la amistad, la vida, la muerte y la ilusión. Su agradecimiento por los seres que han traspasado las fibras mas íntimas de su alma.

10/13/2000