El coquí es un tipo de rana nativa de Puerto Rico, llamada así por el característico sonido que producen los machos de la especie. Aunque existen coquíes enotros países, en Puerto Rico esta rana se considera una suerte de emblema nacional en el imaginario popular. En el país existen 17 especies, algunas en grave peligro de extinción debido a la destrucción de su hábitat.

La urgencia de crear conciencia sobre los coquíes y de preservar su hábitat es lo que inspiró al biólogo de vida silvestre Billy J. Santiago a crearla página de Facebook Salvemos los Coquíes, dedicada a difundir información sobre estos anfibios tanto a la comunidad científica como al público en general.Como se puede leer en la descripción de la página:

‘Salvemos Los Coquíes’ es una iniciativa enfocada en difundir información general y de libre acceso tanto para personas sin conocimientos especializadosen biología como también para biólogos y otros profesionales de la ciencia sobre los anfibios de Puerto Rico, y así llevar un mensaje sobre la importanciade estos animales como parte integral de los ecosistemas de Puerto Rico y su cultura. El objetivo de Salvemos Los Coquíes es compartir ampliamente 
información detallada y actualizada de la diversidad, hábitos de vida, distribución geográfica y biología general de los coquíes de Puerto Rico a la vez que sebusca generar conocimiento y conciencia social que a la larga favorezcan su protección y manejo adecuado.
Algunos datos curiosos sobre los coquíes:

Los coquíes no pasan por la etapa de renacuajo o larva. Cuando los huevos eclosionan, los coquíes emergen como adultos en miniatura.El macho de la especie es quien se encarga de cuidar de los huevos una vez la hembra los pone.

El nombre científico de los coquíes, eleutherodactylus, significa “dedos libres” [en], aludiendo al hecho de que no tienen las patas palmeadas.
En otras palabras, los dedos de los coquíes no están ligados entre sí por una membrana, como sucede con muchas otras especies de ranas.

Los diferentes cantos del coqui

La deforestación y el desparrame urbano afectan adversamente sus hábitats.

El coquí, aunque no está en peligro de extinción en estos momentos, sí está gravemente amenazado, como muchas otras especies. La deforestación y el desparrame urbano
afectan adversamente sus hábitats. El cambio climático parece afectarle también y, según un estudio, para adaptarse se ha vuelto más pequeño.

En Puerto Rico teníamos 17 especies nativas de coquíes, pero ya quedan 14. El coquí palmeado, el coquí Eneida y el dorado no se han vuelto a ver. 
Como anfibios nativos nos quedan también el Sapo Concho y la Ranita de Labio Blanco.

Del coquí se habla mucho, pero se sabe poco. 

Los deditos de los coquíes no están unidos por una membrana como otras especies de ranas, por eso el nombre de Eleutherodactylus, que significa “dedos libre”. 

En marzo murieron miles de coquíes en el incendio criminal en el Bosque del Pueblo, en Adjuntas. (david.villafañe@gfrmedia.com) 

En Puerto Rico teníamos 17 especies nativas de coquíes, pero ya quedan 14. (david.villafane@gfrmedia.com)